martes, 21 de agosto de 2007

la paciencia, un don que solo Dios nos puede dar

Buenos días hermanos y amigos, que el amor de Nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros...



Día a día pasamos por múltiples situaciones que nos causan desesperación, falta de esperanza, preocupación, tribulación, angustías e inclusive dolor; sepan hermanos que existe una persona que nos ha dado la posibilidad de obtener un apoyo en todo momento ante cualquier situación de nuestras vidas. No es fácil lo acepto, pero él siempre está dispuesto a tomar sobre sus hombros sus problemas y ayudarnos a solucionarnos, él siempre está dispuesto a darnos consolación ante nuestros problemas, en fin él está dispuesto a apoyarnos ante cualquier situación. Saben el poner nuestra confianza en algo que no podemos ver es difícil, pero él mismo lo dijo "bienaventurados los que sin haber visto han creído".



No es difícil obtener este apoyo, sólo debemos pedirle a Jesucristo que entre en nuestras vidas al decirle que estamos arrepentidos de todos nuestros pecados y creemos que él es el hijo de Dios, quién nos salvo al dar su vida en la cruz y que queremos que él mande el espíritu santo a nuestras vidas para que nos guíe.



Al obtener esta guía se obtienen un sin fin de beneficios entre los cuales están los detallados en los siguientes versículos...



Gálatas 5: 22-23



22. Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,

23. mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley



¿No creen que es algo increible que se puedan obtener estas cosas tan dificiles de encontrar hoy día? pues dejenme decirles que si aprendemos a poner las cosas en las manos de Dios esto es posible. No digo que sea algo que podremos conseguir de inmediato sino que esto es un proceso en el cual debemos día tras día orar a Dios aceptando cada uno de nuestros pecados, errores, y defectos que deseamos poner en sus manos. En mi testimonio personal ha sido algo difícil, pero he descubierto que la forma más efectiva de orar es mediante los siguientes pasos dentro de la oración. 1). Alabarle y reconocer su poder. 2). Darle gracias por las bendiciones, pruebas, problemas, en fin por todo (Efesios 5: 20 "dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo"). 3). Pedirle a Dios por nuestros hermanos, amigos y familiares, es decir por nuestro prójimo. 4). Pedirle a Dios por nuestras necesidades. 5). Encomendar toda nuestra oración en el nombre de Jesucristo nuestro señor.



No es un patrón que no pueda ser modificado, sino que es el orden planteado por Jesucristo en la oración ejemplar "El Padre Nuestro".



Recuerden hermanos que Jesús dijo: "Si puedes creer, al que cree todo le es posible"(Marcos 9:23).



Que Dios continúe en todo momento ofreciendo bendiciones a vuestras vidas y la de los suyos...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente, gracias, enriquecedora lectura!!!